National Office of Security Enforcement (NOOSE)
La National Office of Security Enforcement (NOOSE) es una agencia federal de aplicación de la ley altamente especializada, dedicada a mantener el orden y proteger la seguridad nacional en situaciones de alto riesgo. Esta entidad opera a nivel nacional y cuenta con múltiples divisiones tácticas capaces de responder de manera inmediata ante emergencias complejas.
Entre sus funciones principales se encuentran:
Respuesta táctica de emergencia, desplegando equipos entrenados para intervenir en situaciones de crisis como atentados, secuestros o tiroteos activos.
Patrullaje fronterizo, vigilando las zonas limítrofes del país para prevenir el tráfico ilegal de personas, armas y sustancias prohibidas.
Patrullaje aéreo, utilizando helicópteros y drones para la supervisión de áreas de difícil acceso o para apoyar operaciones terrestres.
Unidades de desactivación de explosivos, especialistas en neutralizar amenazas explosivas y realizar investigaciones relacionadas con artefactos peligrosos.
Operaciones de campo, llevando a cabo misiones encubiertas, redadas y actividades de inteligencia en zonas urbanas y rurales.
Además, en cada una de sus estaciones estratégicas, NOOSE cuenta con una fuerza especial antidrogas, dedicada exclusivamente a combatir el narcotráfico, desmantelar laboratorios clandestinos y arrestar a miembros clave de organizaciones criminales.
Actualmente, a nivel estatal, la agencia se encuentra bajo el mando del director regional Ethan Graves, un veterano con años de experiencia en operaciones de alto riesgo. Graves fue asignado al cargo tras el controvertido caso del asesinato de Paco García, un incidente que sacudió los cimientos de las instituciones de seguridad.
Este suceso cobró mayor notoriedad cuando Chin Kalahari, principal sospechoso del homicidio y cabecilla de una red criminal internacional, fue liberado por Antonio Abajo Marlaska, en ese entonces oficinista del Interior del Estado. Esta polémica decisión generó un escándalo político y judicial sin precedentes, lo que forzó una reestructuración interna en varias agencias y motivó el nombramiento urgente de Graves como nuevo líder de NOOSE en la región.
Desde su llegada, Graves ha prometido una tolerancia cero con la corrupción y una ofensiva directa contra el crimen organizado, buscando restaurar la confianza pública y la integridad de la institución.
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